VUELTA A LAS ANDADAS

Tras truncarse la racha positiva con la derrota ante la R.Sociedad en casa, el equipo se presentaba en el Bernabeu con la intención de sacar algo positivo a pesar de la abismal diferencia económica entre ambos clubs materializado en los jugadores.

El partido comenzaba tranquilo, a priori era buen síntoma para los nuestros ya que un partido tranquilo es sinónimo de no encajar muchos goles y tener la ocasión de transformarlo nosotros en alguna acción aislada.

Pero , conforme avanzaban los minutos la posesión iba siendo claramente dominada por los blancos a lo que los nuestros respondían encerrándose en su propio campo y a verlas venir.  Esta fue la dinámica durante el resto del encuentro.

Un equipo que no era capaz de mostrar la más mínima sensación de peligro. Con un Gerard Moreno solo en punta, al que en 90 minutos le llegaron cuatro balones y ni siquiera crearon peligro.  Un Piatti que cuando cogía el balón e intentaba avanzar, no tenía compañeros en el frente para trenzar cualquier tipo de jugada. Lo mismo que Reyes, que aun intentándolo, su soledad en la banda no daba lugar a jugadas de ataque.

Un centro del campo excesivamente defensivo, y una defensa encerrada en la zona del área, abrieron las puertas a que los locales iniciaran - con grata facilidad - numerosos ataques que finalmente culminaron con gol.

El Espanyol, sin un ápice de sensación de pelear el partido, iba apagándose poco a poco. El encuentro nos dejaba una sensación muy rara. Pues este tipo de planteamientos nos recuerdan a ese Espanyol sin ambición de temporadas anteriores, que nos aburría al no mostrar intención de ir a por el partido.

No puede mencionarse mucho más de esta jornada, pues ha sido tan breve como el juego del equipo. Esperamos, eso sí, que la siguiente jornada en casa volvamos a nuestra mejor versión y consigamos los 3 puntos para seguir siendo ambiciosos hasta el final de temporada.

Un saludo especial a algunos miembros que acudieron por su cuenta a presenciar tan aburrido encuentro. Eso sí, la fidelidad a la blanquiazul bien reflejada queda.